Para los sorianos cambiar de lugar de residencia es un hecho muy común. La despoblación que sufrimos empieza con nuestros jóvenes que llegado el momento de SALIR a estudiar, lo hacen, y ya son pocos los que vuelven, simplemente por el hecho de las oportunidades laborales.
Pero el soriano, es soriano, soriano, soriano, y éste amigo que vive por Madrid, lo lleva en la sangre. Casado con una asturiana, viven en la capital de España. Madrid está muy cerca de Soria, estamos a 2 horas y media más o menos en coche. Además desde hace unos meses ya tenemos Autovía y es muy fácil desconectar de la marabunta de la ciudad en un momentito. Como os digo en un momentito te plantas en la naturaleza más desbordante, en una tierra acogedora, optimista y deseosa de recibir a sus hijos, los que anidan fuera de las aguas del Duero y los nuevos, los que vienen y se enamoran….
Y así en la sangre, en las melodías de las dulzainas, Ayda, para el 31 cumpleaños de su pareja, decidió hacerle este regalo: zapatillas personalizadas y pintadas para este Soriano, desde los pies, con las zapas del cambio, la zapatilla número 1, la zapatilla que nos ha traído hasta ésta, casi casi la 7000, TU, soriano, camina, porque «Caminante no hay camino, se hace camino al andar».
Gracias por ver la vida desde este lado.